jueves, 26 de agosto de 2010

Toy Story 3. El lenguaje cinematográfico entendido a la perfección.

Dado que en este mismo blog pueden encontrarse los listados en los que valoro, siempre según mi propio criterio, las películas que voy viendo, tanto en salas de cine como en formato doméstico, la siguiente afirmación resultará un tanto redundante. Aún así la voy a hacer: Toy Story 3 es el mejor estreno de los que he visto en los últimos tiempos.
La última producción de John Lasseter para Disney Pixar cierra de manera magistral la trilogía que iniciara, revolucionando el cine de animación, con Toy Story allá por el año 1995, cuando Pixar era solo Pixar y todavia no se había fusionado con Disney.
Mucho ha llovido desde aquella primera aventura de nuestros juguetes favoritos. Andy ha crecido y va a ingresar en la universidad. Sus juguetes permanecen desde hace mucho tiempo guardados en un arcón y se encuentran expectantes ante el desconocimiento del destino que les aguarda, conscientes de que su tiempo con Andy ya ha terminado y temerosos de que el vertedero pueda ser su parada final.
Olvidémonos de la expresión película de animación. Toy Story 3 es una película. Sin más. Puro cine. Y para todos los públicos. Olvidémonos también de considerar que una película en la que sus protagonistas estan dibujados o animados por ordenador es, necesariamente, una película dirigida exclusivamente al público infantil.
Toy Story 3 es una película que, además, resulta perfecta tanto a nivel narrativo como en su apartado técnico. Una película que entiende y emplea el lenguaje cinematográfico a la perfección.
Resulta habitual, como creo haber expresado en alguna otra ocasión, que el cine de animación acostumbre a ofrecernos obras en las que, tras un inicio muy adulto, se tienda a la acción trepidante a ritmo desmesurado como una concesión al publico mas infantil. Ocurria, por poner algún ejemplo, en Wall-e, Up y resultaba especialmente evidente en 9, una película en la que la ambientación post-apocaliptica y sombría constituía una ocasión inmejorable para haber desarrollado una historia animada exclusivamente para adultos. En todas estas películas había una clara ruptura de la historia a nivel narrativo que separaba la parte que iba dirigida al público adulto de la que iba dirigida al público infantil.
No es el caso de la película que nos ocupa. En Toy Story 3 desaparece tal fragmentación. En ella las secuencias de acción, las fases cómicas y el cine mas intimista se encuentran perfectamente integrados y se fluye de unos a otros de manera completamente natural. A eso me refiero cuando hablo de perfección narrativa y buen empleo del lenguaje cinematográfico.
Ésta es una película que la disfruta, en la totalidad de su metraje, tanto el adulto como el niño que llevamos dentro o el niño/a que nos acompañe al verla.
Toy Story 3 es una película en la que uno, además, puede sentirse identificado. Al menos a mí me ha sucedido. ¿Raro, tratándose de cine animado? No, gracias al gran trabajo realizado en la confección del guión. Yo, al igual que Andy, he tenido algún juguete especial del que me ha resultado muy dificil desprenderme alcanzada la edad adulta y al que tuve que acabar por buscar una buena casa de acogida.
Un recuerdo a mis Geyper-man,...alli donde esteis.
Para ver el trailer pinchad aquí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario